19 feb 2010

Amigos, el algodón no engaña

Hola a todos los lectores de este humilde Blog, humilde como el torero que en la actualidad lo representa, pero grande y sentimental, como de la misma forma expresa el toreo Juan Antonio Millán.
En primer lugar quisiera dar las gracias públicamente en nombre de esta Peña Taurina a Agustín Hervás como a José Olid, que ellos si son en verdad sostén y paladín de esta Fiesta, engrandeciendo con sus ilustradas plumas este, como he dicho; humilde Blog.
A Don José Olid, agradecerle su último artículo con ilustración fotográfica porque ha venido a corroborar lo que en su día escribí para el medio de comunicación local Úbeda Información.
Don José, acaba su artículo poniendo en letras mayúsculas “HEMOS VISTO UN TORERO” y acompaña al mismo unas instantáneas que muchos de los que ocupan los tendidos son incapaces de percibir en ese preciso instante. Esa es una de las grandezas del toreo, la fugacidad del momento, lo irrepetible, el toreo es algo que no puede ensayarse, cuando surge queda grabado en la retina por los siglos de los siglos. El toreo también se compone de matices, del mismo modo unos saben apreciarlos, otros sin embargo (la mayoría de las ocasiones por desgracia), no saben siquiera que es un matiz. Y esto no es lo grave, lo grave es que haya quien se considera “entendido” e independientemente de escapárseles lo comentado, nieguen sistemáticamente el Pan y la Sal a muchos toreros, máxime como es el caso, cuando se trata de un torero local.
De Juan Antonio escribí en su día en el periódico local Úbeda Información que, miedo me daba hablar de este torero al ser de la ciudad, dado que puedan pensar los lectores foráneos, que arrimamos como suele decirse “el ascua a nuestra sardina”, pero nunca más lejos de la realidad, algún foráneo cercano a mi localidad comentaba de las exquisiteces de este torero incluso preguntando de quién se trataba. “Lógico” entre comillas, y esto el buen aficionado lo entenderá cuando les diga que Rivera y “El Cordobés” eran los integrantes del cartel junto a José Díaz “El Doctor” en la tarde de su despedida.
Fue una tarde triunfal incluido el ganado de Gavira que se lidió, el mejor presentado y de más cuajo de toda la Feria de San Miguel 2009, se abrió la Puerta Grande para los cuatro diestros actuantes y el ganadero.
La referencia al festejo decía así: En tarde primaveral de temperatura y con una asistencia de público que ocupó medio aforo se ha celebrado el festejo con ocho toros en el que nadie se aburrió, es más, los corrillos taurinos a la salida de la plaza eran de satisfacción por parte del público asistente, algo que los más agoreros daban por imposible antes de la celebración del festejo ya que si hemos de ser claros, nadie apostaba por el éxito de este cartel por el mero hecho de estar anunciados dos toreros de la ciudad, esto es así de claro y así de duro. Por esto, ahora que hemos visto el resultado habría que preguntar ¿Hubiera desmerecido el festejo si en lugar de lidiarse ocho toros, se hubiera celebrado una corrida al uso con los tres espadas locales?, lo dejo en el aire para que cada cual opine al respecto (He de decir que yo mismo hice el comentario en varias ocasiones y literalmente se me rieron).
Seguía diciendo que estos toreros demostraron estar a la altura e incluso por encima de sus compañeros de infinitamente más cartel que ambos, pero como se dice ahora ser “mediático”, vende.
Juan Antonio Millán “Carnicerito de Úbeda”.- En verdad “Carnicerito de Úbeda” estuvo una vez más en su feria, rotundo ante sus paisanos, magistral, vestía de blanco inmaculado, como el toreo que realizó a sus dos oponentes. Si algo vimos de toreo en esta tarde corrió a cargo de este joven torero que realizó ambas faenas muy entregado, estando por encima de sus oponentes. La faena al primero de la tarde, un toro con recorrido que resultó ser la mejor del encierro, estuvo cargada de temple y entrega por parte del torero, destacar las tandas con la mano izquierda rematadas con soberbias trincherillas y otra tanda rematada con un pase del desprecio, la estocada a este toro fue en toda la yema con lo que el público solicitó las dos orejas que le fueron concedidas.
A su segundo, un toro que nada me gustó en el apartado arremetió muy brusco en el capote, echando las manos por delante y volviéndose con mucha rapidez, aún así Juan Antonio pudo sacarle algún lance vistoso. Buen comienzo de faena con la muleta haciendo las cosas con mucho gusto y empaque, vimos a un “Carnicerito de Úbeda” muy hecho, siempre bien colocado y dando al toro la distancia que este requería, por el pitón izquierdo se quedaba corto y el torero alargó los muletazos todo lo que pudo, con este toreo tan de verdad es lógico que el público, paisano y foráneo estuvieran toda la tarde de parte de este torero, pues como he dicho otras veces, para apreciar lo bueno no hay que entender, te llega y basta. En esta ocasión pincho antes de recetar otra buena estocada que hizo rodar al toro, fue premiado con una oreja.
Hoy, gracias al amigo José Olid y el fotógrafo Paco Funes, vemos reflejado con un gran valor testimonial como él mismo define, lo que en su día transmitiera caligráficamente y que hoy podemos disfrutar visualmente de lo que es capaz de expresar en el ruedo este buen torero de Úbeda.
Ciudad de Úbeda, apoyemos a nuestros toreros, exijamos su inclusión en la Feria de San Miguel, no olviden que parte de ella se financia con dinero público. Y como queda aquí demostrado, vale la pena apostar por ellos, no hagamos el juego a los poderosos.
Juan Antonio es un buen torero, grande entre los grandes si los que dirigen el sistema le dieran paso, no merece estar en el puesto que ocupa en el escalafón. Pero……. piensen un momento, ¿Tendrá razón aquel torero que más o menos dijo?, no me ponen a pesar de lo que he demostrado, no sea que triunfe y al no pertenecer a sus equipos, pueda llegar un día “exigiéndoles”.