8 oct 2010

Luisa Leiva apoya a Carnicerito de Ubeda


Ver minuto 15,25 a 16,25 Luisa Leiva
Ver minuto 18,50 a 20,15 Concejal de Festejos

Programa en el que Luisa Leiva apoya la inclusión de Juan Antonio Millán en los carteles de esta Feria Taurina y el apoyo llevado a cabo por sus seguidores.
Del mismo modo el Concejal de Festejos dá su opinión al respecto.
Esta es la nota que se publicó en el periódico Úbeda Información, la cual muestra la señora Leiva en apoyo y petición al Alcalde Úbeda y que al parecer no gustó a ciertos taurinos de la propia ciudad:
Sr. Marcelino Sánchez, Alcalde de la diudad de Úbeda. En conversaciones mantenidas con el torero Juan Antonio Millán, le prometió que torearía estre año en la Feria de Úbeda después del triunfo del año pasado.
Ahora con la ausencia del torero alicantino José Mª Manzanares tiene usted la oportunidad de demostrar al pueblo de Úbeda, a su Peña Taurina y a toda la afición taurina, esa sensibilidad además de por hacerlo en justicia, con los toreros de la ciudad.

El Presidente de la Peña Carnicerito de Úbeda quiere dar desde este blog las gracias tanto a Canal 9 La Loma de Baeza como a 10 TV de Úbeda así como a todo aquel que ha apoyado nuestra postura en defensa de que el torero "Carnicerito de Úbeda" debería haber sido incluído este año en la cartelería taurina; y que si no se hizo en un principio, era el candidato en justicia de haber entrado en una de las dos sustituciones que se han producido en esta feria. Si bién el torero Manuel Jesús "El Cid" en la primera sustitución cortó tres orejas, podía haberse incluído al torero "Carnicerito de Úbeda" en la segunda de las mismas y no a El Cid nuevamente. Pues los triunfos conseguidos las tardes que ha toreado en esta plaza además de que el mismo número de orejas cortó el torero Juan Antonio Millán el año pasado en la corrida de Gavira lo avalaban, siendo otorgada en esa edición la mención especial a los triunfadores de la feria, no siendo otorgado el máximo galardón por motivos meramente mediáticos, "gracias" a un "buen aficionado" que expresó un argumento el cual convenció al Jurado, trás decidir que el triunfador era el torero "Carnicerito de Úbeda".
Estamos convencidos que tras todo lo ocurrido hay algo personal contra el torero y desearíamos que alguien nos lo explicara puesto que no lo entendemos.

Los Chavillos

                                                                        
Aún y por tierras reacias a prescindir de su ayer, se conservan aquellas viejas “tinadas” en las que daban cobijo, pasturas y descanso  a las bueyadas tras la jornada dura, larga e intensa. Pesebreras alineadas,  de granito por lo general, piedra cercana, con la que a la vez se construyó la pared, que a modo de cercado, cortado o cortiño, que se diría en las proximidades a la carretera de Portugal, según vas transitando hacia el país vecino dejando a un lado y a otro, pueblos como Pederuelas, Fuentesaúco, Aliste, Bermillos etc......
Grandes tinadas de penseo, que se conservan y en las que se pueden percibir, aprovechando cualquier rincón ese pebrito adicional para los “chavillos”, que no son otra cosa que terneros de la anterior camada, generalmente poco desarrollados, degenerados genéticos o simplemente mal atendidos por sus madres, si es que no la perdieron; también los malahijados. Habitualmente bien tratados por los castrados destinados al trabajo,  no han ido ni en crecimiento ni en fuerza, a la par que sus hermanos o no han estado en condiciones de acudir al mercado de Astorga o Benavente, en algún caso. Entre los racionales, donde también los habemos, no han podido acudir a la Complutense de Madrid, a la pontificia de Salamanca, o la de Sevilla más cercana.
Más distantes y por estos lares de “la loma”, todavía en ese Riez, Torrechante -ya en términos próximos al de Ubeda- Torrubia y en algún otra finca ganadera que lo fué, se encuentran los vestigios de aquellos usos. Puede que en la propia ciudad, más no los tengo localizados; de otra forma les daría su dirección. Espectáculo puro, grotesco y usual.
Pesebreras, pesebreros, “chavillos”, mansos y bueyadas. De todo hay;  mejor aclararlo para su buen entender:
En el uso de pesebrero o cabestrero, de su total contenido semántico, hemos pasado al concepto actual, un tanto sarcástico, de la expresión pesebrero, que no es otra cosa que aquél ser racional o no, que come en o del pesebre, que por cierto es mucho más cómodo que comer pasto en campo abierto en la dehesa, dejándose los incisivos entre las piedras; o del fruto de su trabajo, el sufrido racional. No todos, irracionales o no, están dispuestos a comer de tal guisa, a sabiendas de que a la caída de la tarde, también a deshoras, les espera una buena ración, cómoda y sin tener que trabajársela, incluso cobrando “el quinto” por delante. El cabestrero ya no es el que cuida, doma, forma la parada y saca lustre al afinar el alambre; es simplemente aquél que lo llevan del cabestro (cabo, cuerda o ronzal) sin otra doma que la sumisión.
 Son y están entre los racionales, aquellos de los que hice mención en mi pregón taurino para San Miguel. Que no quise señalarlos con el dedo, ya que por sus obras y sus hechos les conoceríais. Se señalan ellos solos; huelga que lo hiciéremos los demás.
 Pero... y los “chavillos”? No tengo nada contra ellos, los irracionales. Respecto de los otros,  tan acostumbrados al pesebrito, bajo como ellos, ya que todavía no alcanzan al pesebre del común “tinao” pesebrero, de la información servil y deforme,  con señorito que les dicta, jamás reponeran y se quedaran, en eso...en “chavillos”. Se les atraganta la harina.
José Olid